los que se quejan
construyen prisiones/ que
los sobreviven
los que pelean
forjan los grilletes/ que
los emancipan
los que están tristes
y se dejan estar
por la tristeza
los que se salvan
buscando una condena
que nunca llega
los que no ven
y destrozan sus frentes
contra el vacío
los que llamaron
a un número cualquiera
que era el correcto
los que se esfuerzan
en la inútil empresa
de la desidia
los que se encuentran
en epitafios de otros
y no se lloran
los que desprecian
con ese cruel furor
sin sentimiento
los que se alegran
de ver este desierto
tan atestado
los que se aburren
y aburren con tres versos
a todo el mundo
construyen prisiones/ que
los sobreviven
los que pelean
forjan los grilletes/ que
los emancipan
los que están tristes
y se dejan estar
por la tristeza
los que se salvan
buscando una condena
que nunca llega
los que no ven
y destrozan sus frentes
contra el vacío
los que llamaron
a un número cualquiera
que era el correcto
los que se esfuerzan
en la inútil empresa
de la desidia
los que se encuentran
en epitafios de otros
y no se lloran
los que desprecian
con ese cruel furor
sin sentimiento
los que se alegran
de ver este desierto
tan atestado
los que se aburren
y aburren con tres versos
a todo el mundo
Evidentemente a mí no se me da muy bien la poesía, a algunos los entendí y otros me pasaron olímpicamente de largo! Hay que culturizar al pueblo (i.e. yo)! jajajaj!
ResponderEliminarEl de los epitafios me pegó fuerte, che, muy fuerte.
ResponderEliminarPor ahi sería porque encontré algunos problemas gramaticales y no los hice míos, ja, ja.
Un abrazo querido Pancho.
Alicia
Ahora entndí tu comentario(Alicia). Y me di cuenta de que es una imagen muy interesante: que una falta de ortografía sea el símbolo de nuestro paso a la inmortalidad.
ResponderEliminarYo he visto tumbas (o nichos) con faltas de ortografías. No puedo explicar por qué, pero me conmovieron mucho más que los grandes mausoleos. Después de todo, qué cosas más raras se te ocurren a vos, eh...